Abrazando la Verdera Belleza: Reflexionando en el Envejecer, Femenidad y Esteriotipos.

Desde hace un par de meses he empezado a cansarme de ir a la peluqueria cada mes para teñirme el cabello, todo empezó cuando comenzaron a brillar las primeras canas, marcando el inicio de mi camino con los tintes, siempre usando productos sin amoniaco. Pero he notado que estas están invadiendo todo mi cabello, haciendo que tenga que regresar a la peluquería en espacios cortos de tiempo. Hasta que de pronto hace un par de meses un pensamiento asaltó mi mente, dejarme las canas crecer , abrazarlas, aceptarlas y darles la bienvenida. Cuando compartí esta idea con algunas mujeres cercanas a mi, muchas me dijeron “¡No! te verás vieja y te quedará horrible”, algo que tomé con mucha gracia. Pero que me hizo reflexionar no solo, sobre los patrones de belleza, sino también, en ese miedo tan grande que todos tenemos, a la vejez, queremos ser eternos, no podemos aceptar la idea de que un dia nos iremos, porque nuestra estancia en este mundo, aunque parezca larga, es muy breve. Desde muy joven no uso maquillaje, debido a que soy alérgica, algo que poco a poco me enseñó a abrazar mi rostro como lo es, con sus imperfecciones, con sus partes bonitas, y al mismo tiempo a aceptarme a mí misma. No es algo sencillo cuando tienes una sociedad con estereotipos de belleza y donde siempre se está dictando las reglas de cómo las mujeres deben vivir su feminidad. Por lo que entonces, esto me hace sentir que es más fácil si acepto mi edad y la evolución de mi cuerpo y de todo lo que esto conlleva, algo que no es ciertamente sencillo pero que creo que da libertad para simplemente ser y disfrutar de lo que eres. Una revolución femenina también sería que cada mujer viva su feminidad de la forma que ella decida, la que la haga sentir más BONITA de lo que ya es. Después de todo, la belleza más pura es aquella que surge del interior, aquella que surge de la tranquilidad y la paz de un corazón y que se revela a través de la historia de su propia vida. Abracémonos entre mujeres, respetando y aprendiendo de cada una de nosotras, cultivando lo que realmente importa en esta vida, el AMOR. Aun no termine de decidir que haré con mi cabello, les ire contando que es lo que mi intuición me va hablando pronto. Tampoco intento decirles cómo vivir su feminidad, solo compartir mi experiencia y ver si puede inspirar para reflexionar, después de todo, todas y todos somos BONITAS y BONITOS, en el significado más profundo de la palabra.