Mis dias con IBS tipo D. ¿Cómo manejar tu vida diaria con un diagnóstico?

Hace unos días escuchaba a  Mel Robbins, autora de muchos libros y presentadora de podcast, hablar de la “ rutina mañanera del  millón de dólares”. Ella nos habla de la importancia de este momento del día, y cómo debemos usarla de forma adecuada  para el logro de nuestros objetivos, cualquiera que estos sean. Personalmente es algo que he aprendido desde que fui diagnosticada con ISB tipo D, crónico y severo. He tenido crisis en las que me he visto con mi vida social, laboral totalmente paralizada, afectando  mi salud mental también.  Pero todo esto me dio la  oportunidad de aprender muchas cosas que me hicieron cambiar de perspectiva la visión que tenía de mi vida.  Y lo primero que empecé a cambiar fueron mis hábitos y rutinas, empezando por la mañana. Descubrí que la mejor forma de empezar a afrontar mi nueva realidad con buena actitud y con una mirada más compasiva de mi misma, era empezar levantándome temprano y agradecer por que aun hay mucho que puedo hacer, que estoy viva y que las oportunidades están ahí para mi. Luego tender mi cama, asearme y  luego  estirar mi yoga mat, y empezar mi sesión de yoga. Es el momento en el que puedo enraizar, resolver cuál será mi actitud y que es lo que quiero lograr en este día, como también darme un momento de agradecimiento hacia  la vida. Después de ello preparo mi desayuno  para luego realizar mi caminata diaria. Al final de todo esto puedo empezar por la agenda que tengo preparada para mi día. Hoy puedo decir que esta rutina con estos hábitos que he creado para mis mañana son indispensables para crear una actitud positiva cada día, sobre todo en los momentos difíciles. No siempre es fácil,hay días en el que el dolor puede ser intenso, y aun asi continuo, sin presiones. Puedo hacer una sesión de yoga en silla o adaptado a lo que necesito en ese momento, mis caminatas pueden ser más cortas,  caminar un poco y luego sentarme y mantener mi conciencia más plena observando lo que me rodea. Todo esto hará que no decaiga en mi compromiso por vivir de forma más plena y reconciliada con mis limitaciones físicas. Mantener mi casa limpia y ordenada es otro hábito que me ayuda a ordenar y esclarecer mis ideas y sentir que estoy en un lugar bonito, agradable y acogedor. Profundizando, aún más, esto me ayuda como arte terapeuta a trabajar y desarrollar mi creatividad, el compromiso conmigo misma, desarrollar una escucha consciente y honestidad,no solo conmigo, sino también con las personas con las que trabajo. Dar lo mejor de uno cada día, es la mejor forma de empezar, y de vivir en el presente, porque un buen comienzo puede ser el inicio de un viaje maravilloso del cual has estado soñando hace mucho tiempo.